Crítica de SensaCine.com para Fred Claus, el hermano gamberro de Santa Claus: Cine navideño macarra

Después de 'De boda en boda', película que en su concepción disparatada acaba siendo una comedia notable, David Dobkin dirigió 'Fred Claus, el hermano gamberro de Santa Claus', cuyo planteamiento es el siguiente: Paul Giamatti es Santa Claus y recibe la visita de su hermano, la oveja negra de la familia, Vince Vaughn. A partir de ahí, y sin abandonar que se trata de una película de corazón y de naturaleza navideña, Dobkin dirige una película enloquecida y fresca, pero que en su excesiva duración acaba perdiendo intensidad, ritmo e interés, cayendo, además, como casi no podía ser de otro modo, en una resolución final de claro aliento comercial y convencional. Aun así, 'Fred Claus, el hermano gamberro de Santa Claus', tiene buenos momentos con Vaughn entregado a la locura y arropado no solo por Giamatti sino también por actores de la talla de Rachel Weisz, Kevin Spacey, Miranda Richardson o Kathy Bates, que otorgan a la película de un cierto toque sofisticado del que en realidad carece. Pero no se le puede negar a Dobkin su capacidad, demostrada en todas sus películas, de entregar buenos entretenimientos que, al final, siempre se encarga de destrozar.

A favor: Los actores.

En contra: Las concesiones al buen rollo navideño.