El mayor Howell Brady (Jeff Chandler) acaba de llegar a Fort Clark, una ciudad del estado de Oklahoma, para luchar contra las contínuas incursiones de los indios kiowas liderados por el jefe tribal Satanta. Allí le espera el coronel Jackson Meade (John McIntire), con el que decidirá reclutar un ejército de indios seminolas a cambio de alguna que otra provisión y una porción de tierra. Los acontecimientos que se cuentan en la película desembocaron en la conocida como "Masacre de la caravana Warren", que tuvo lugar el 18 de mayo de 1871.