Crítica de SensaCine.com para La edad de la ignorancia: Contra el imperio americano

Las películas de Denys Arcand siempre han tenido como protagonista a la hipocresía social. A una serie de relaciones familiares y sociales que devienen en una prisión para el individuo, atrapado en un montón de normas no escritas que lo obligan a comportarse de una determinada razón. Ahí está su rompedora 'Jesús de Montreal', en la que Jesucristo aparece en el mundo actual y es igualmente condenado en un mundo dominado por burócratas, economistas y abogados. O su díptico en el que ataca la promoción del estilo de vida americano, 'El declive del imperio americano' y 'Las invasiones bárbaras', donde traza un ácido simil entre EEUU y el imperio romano.

El cine de Arcand ha sido siempre manipulador. Es un peaje que hay que pagar para disfrutar de su humor agresivo. Pero quizás en 'La edad de la ignorancia' se le va la mano. El director plantea una sátira sobre las aspiraciones y deseos de un hombre por convertirse en el prototipo de macho que atrae a todas las mujeres. Esta desconexión entre su vida real y la soñada da lugar a un ataque a la masculinidad y a la falocracia existente, así como a la explotación de la mujer por su imagen y su físico. Pero más allá de este artificio no exento de moralismos exagerados, la película no tiene nada, careciendo del drama y la intensidad emocional de sus mejores trabajos.

A favor: Los numerosos gags sobre los arquetipos femeninos y masculinos.

En contra: Es una sátira excesiva y manipuladora.