¿Invisible o vacío?
por Covadonga G. Lahera"Bacon es muerte", suelta un activista vegetariano en plena calle mientras los protagonistas de El hombre sin sombra 2 huyen de "la amenaza fantasma". Pese a que tuvo aceptables resultados en taquilla, la primera parte dirigida por Paul Verhoeven no tuvo demasiada buena prensa, aunque en realidad tenía un par de golpes o tres que lograban sorprender. Esta prolongación que cambia de realizador y de actores no atesora mejor fortuna. Sus personajes están tan esquemáticamente presentados que sus motivaciones y acciones nos resultan desprovistos de interés y emoción.
La combinación de thriller y ciencia ficción, que protagonizaban Kevin Bacon, Elisabeth Shue y Josh Brolin en el filme de Verhoeven, responde aquí a las bastante poco estimulantes interpretaciones de Peter Facinelli, Laura Regan y Christian Slater, dirigidos por el realizador suizo Claudio Fäh. La historia de este hombre invisible que a priori pretendía beber de H. G. Wells se reduce a una sucesión de acechos, persecuciones y peleas que solo parecen interesadas en lucir los efectos de posproducción y dejar al espectador con gesto boquiabierto cuando los personajes se ponen a hablar de células y componentes químicos.
A favor: Algunos efectos especiales. Por ejemplo, los combates de "invisibles" bajo la lluvia.
En contra: Deficiente construcción de personajes y trama rimbombante, pero anodina.