En Los Ángeles, Solo, un escritor sin éxito ni inspiración, recibe un consejo de su psicólogo: que se compre un animal de compañía. La convivencia con el animal le parece imposible, no lo soporta -quizá no se soporta a sí mismo-, pero gracias a él, conocerá a Lola, una stripper, con la que entablará una muy buena amistad.