Miller se obstina en la recreación y en la visualización de viñetas imposibles y no duda en dar cobijo a todas las referencias y homenajes que se le ocurren.
Fotogramas
por Jordi Costa
Miller construye, (...), un ejercicio de cine negro para daltónicos, donde los fotogramas parecen pegados entre sí con líquido de embalsamar.
Lo que resulta menos fácil de rebatir es el hecho de que el realizador haya firmado una película fea y confusa, llena de diálogos inanes y aburridos y con unas secuencias de acción que, con franqueza, no son nada del otro jueves.
CAHIERS DU CINEMA
Sorpresa: esperábamos una tarjeta gráfica ya experimentada, árida y rígida, y Miller, por le contrario, nos ofrece un mundo sensorial licuado.
DIRIGIDO POR
Miller se obstina en la recreación y en la visualización de viñetas imposibles y no duda en dar cobijo a todas las referencias y homenajes que se le ocurren.
Fotogramas
Miller construye, (...), un ejercicio de cine negro para daltónicos, donde los fotogramas parecen pegados entre sí con líquido de embalsamar.
IMÁGENES DE ACTUALIDAD
Lo que resulta menos fácil de rebatir es el hecho de que el realizador haya firmado una película fea y confusa, llena de diálogos inanes y aburridos y con unas secuencias de acción que, con franqueza, no son nada del otro jueves.