Crítica de SensaCine.com para Julia tiene dos amantes: Sexo, mentiras y conversaciones telefónicas

El director canadiense de origen sirio Bashar Shbib construyó su carrera a base de docudramas, producciones para televisión y comedias románticas que, de modo invariable, fueron muy bien recibidas en el Festival de Montreal a lo largo de los noventa. 'Julia tiene dos amantes' es uno de los títulos más populares de su filmografía, en parte por la facilidad que demuestra para incorporar desnudos frontales de sus protagonistas a la narración y también por contar con un David Duchovny pre-'Expediente X' en el reparto. Sin embargo, su destartalada factura telefilmesca y el recatamiento argumental frente al flirteo con la provocación a través de la historia de una mujer (Daphna Kastner) que mantiene una tórrida relación amorosa por teléfono con un desconocido (David Duchovny) a espaldas de su marido... hasta que finalmente los dos amantes se encuentran y todo entra en el terreno mil veces trillado del drama sentimental. Prescindible es quedarse corto.

A favor: El planteamiento de un film 'erótico' por teléfono podría haber deparado algo más interesante.

En contra: Es tan aburrida como estéticamente plana.