Es la segunda película dirigida por Craig Gillespie tras Cuestión de pelotas (2007). Recibió el Premio del Gremio de Directores en 2006 y los Premios Emmy y León de Oro (Festival Internacional de Publicidad de Cannes) en 2005.
En los créditos finales aparece el nombre de Bianca Wrangler, que es la muñeca inflable de la película.
Lars y una chica de verdad fue rodada en 31 días.