Harry Potter y las reliquias de la muerte: Parte 1: Críticas

En la séptima entrega de las aventuras de Harry Potter, da la sensación de que se dan demasiadas vueltas cociendo el enfrentamiento final entre Voldemort y el protagonista. Demasiadas situaciones en las que parece que la resolución no llega porque no se quiere que llegue, y eso le resta mucho interés y hace que ese momento culmen que desde que comenzó esta aventura se sabe que llegará, pierda la trascendencia que se le supone. Voldemort pierde mucha magia (nunca mejor dicho) y la película se entretiene demasiado en callejones sin salida o en dar vueltas en círculo

Como el sostén acolchado de una virgen, Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, la Parte I es todo burla, sin recompensa.

Como el sostén acolchado de una virgen, Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, la Parte I es pura burla, cero recompensa. Ningún banquero de inversión que permanezca en pie podría dejar de aplaudir la iniciativa del estudio de reducir a la mitad el séptimo y último libro en J.K. La serie de Harry Potter de Rowling para exprimir el ganso por más oro. Pero una película que se reproduce como un avance de 146 minutos para el capítulo final real - ¡La Parte II abre el próximo julio en 3D! - es un truco definitivo. Para empezar, no hay Hogwarts. Harry (Daniel Radcliffe), Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson) pasan esta película huyendo. Están buscando los cuatro Horrocruxes que contienen piezas del alma malvada de Lord Voldemort (Ralph Fiennes). Esa es toda la trama que obtendrás de mí. Afortunadamente, hay una ingeniosa pieza animada insertada para explicar las Reliquias de la Muerte. En la sección media de la película, el director David Yates y el guionista Steve Kloves tejen nuestro triángulo de amor entre adolescentes en el bosque, pensando en quién está de moda por quién. Bostezo. Hay compensaciones. Radcliffe y Watson comparten una dulce danza. Y Grint, divertido y conmovedor, roba el programa como el celoso Ron. En cuanto a Dobby, rock on, Elf boy. Aún así, no hay suficiente cerca del intrigante Severus Snape (Alan Rickman) y la villanía de las Juventudes Hitlerianas de Draco Malfoy (Tom Felton). Parte I es más desilusión que desastre. Simplemente rueda como algo de una cadena de montaje. No tocado por manos humanas.

Como el sostén acolchado de una virgen, Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, la Parte I es todo burla, cero recompensa. Ningún banquero de inversiones que quede en pie podría dejar de aplaudir la iniciativa del estudio de reducir a la mitad el séptimo y último libro en J.K. La serie de Harry Potter de Rowling para exprimir el ganso por más oro. Pero una película que se reproduce como un tráiler de 146 minutos para el capítulo final real - ¡La Parte II se abre el próximo julio en 3D! - Es un truco definitivo. Para empezar, no hay Hogwarts. Harry (Daniel Radcliffe), Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson) pasan esta película en la carrera. Están buscando los cuatro Horcruxes que contienen pedazos del alma malvada de Lord Voldemort (Ralph Fiennes). Esa es toda la trama que obtendrás de mí. Afortunadamente, hay una ingeniosa pieza animada insertada para explicar las Reliquias de la Muerte. En la sección media de la película, el director David Yates y el guionista Steve Kloves varan nuestro triángulo amoroso de adolescentes en el bosque, mirando quién está caliente para quién. Bostezo. Hay compensaciones. Radcliffe y Watson comparten una dulce danza. Y Grint, divertido y conmovedor, se roba el show como un celoso Ron. En cuanto a Dobby, rock, chico elfo. Aún así, no hay suficiente lugar para el intrigante Severus Snape (Alan Rickman) y la maldad de Hitler Youth de Draco Malfoy (Tom Felton). La parte I es más decepción que desastre. Simplemente rueda como algo fuera de una línea de montaje. Sin tocar por las manos humanas.

Como el sostén acolchado de una virgen, Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, la Parte I es todo burla, cero recompensa. Ningún banquero de inversiones que quede en pie podría dejar de aplaudir la iniciativa del estudio de reducir a la mitad el séptimo y último libro en J.K. La serie de Harry Potter de Rowling para exprimir el ganso por más oro. Pero una película que se reproduce como un tráiler de 146 minutos para el capítulo final real - ¡La Parte II se abre el próximo julio en 3D! - Es un truco definitivo. Para empezar, no hay Hogwarts. Harry (Daniel Radcliffe), Ron (Rupert Grint) y Hermione (Emma Watson) pasan esta película en la carrera. Están buscando los cuatro Horcruxes que contienen pedazos del alma malvada de Lord Voldemort (Ralph Fiennes). Esa es toda la trama que obtendrás de mí. Afortunadamente, hay una ingeniosa pieza animada insertada para explicar las Reliquias de la Muerte. En la sección media de la película, el director David Yates y el guionista Steve Kloves varan nuestro triángulo amoroso de adolescentes en el bosque, mirando quién está caliente para quién. Bostezo. Hay compensaciones. Radcliffe y Watson comparten una dulce danza. Y Grint, divertido y conmovedor, se roba el show como un celoso Ron. En cuanto a Dobby, rock, chico elfo. Aún así, no hay suficiente lugar para el intrigante Severus Snape (Alan Rickman) y la maldad de Hitler Youth de Draco Malfoy (Tom Felton). La parte I es más decepción que desastre. Simplemente rueda como algo fuera de una línea de montaje. Sin tocar por las manos humanas.

aunque en esta entrega d eharry potter haya mucha aventura, no es para anda una buena película de harry potter.

Más de lo mismo, aunque tiene sus puntos. Se hace extremadamente larga y algo soporífera!

Como si de un resumen o un recopilatorio de la saga se tratara, en esta entrega de las aventuras del joven mago Harry Potter, aparecen en breves o cortos papeles, antiguos amigos y enemigos de los tres protagonistas, que tuvieron papel destacado en anteriores entregas. Incluso los conjuros, hechizos o trucos son los que hemos visto en anteriores largometrajes.

La única novedad son las localizaciones, hermosos lugares donde aparecen y desaparecen nuestros aprendices de magos. Pues en esta entrega, Hogwarts desaparece como lugar de la acción.

En ciertos momentos, el argumento me ha recordado a El señor de los anillos, en el hecho de que tenían que transportar una cosa, con el fin de destruirla, pero el portador de tal era dominado por las fuerzas oscuras, o bien, transformaba su carácter.

Aun así consigue entretener las casi dos horas y media que dura, e incluso se te llega a hacer corta, esperando más.

La primera mitad de la película se siente como una montaña rusa con acción, magia y suspenso pero cuando llega la segunda mitad se torna demasiado aburrida. Aunque el guión no se siente flojo y aunque hubo momentos memorables esta película termina careciendo de drama, emoción, brillo y hasta peso emocional, esto último porque siendo honesto no me lastimó casi nada spoiler:
la muerte de Dobby.

Una lástima, película que al comienzo arranca con todo pero que poco a poco se torna aburrida a tal punto en que cuando le faltaba poco más de media hora estaba sin ganas de terminar de verla y cuando la terminé de ver fue una sensación de asco la que tuve, no me sorprende porqué la crítica no la aclamo.

Penúltima entrega de la saga, oscura y dramática. Voldemort ahora sólo tiene un objetivo y es acabar personalmente con Harry Potter pero deberá encontrar otra varita para derrotarlo, la más poderosa. Harry y sus inseparables compañeros se ven obligados a escapar en una huída contínua para hallar los Horrocruxes restantes y encontrar la forma de destruirlos. Gran parte de la película se centra en esta huída, desde ciudades hasta peculiares paisajes en plena naturaleza. Quizás se abuse en minutos de este "camping" al aire libre, aunque si es intencionado para amortiguar el despilfarro económico de efectos especiales que tendrá la última película de la saga, es comprensible. Las tensión aumenta y se nos prepara para el gran final.