Un documental en el que la actriz Sandrine Bonnaire reproduce un sensible retrato de la vida de su hermana pequeña. Una visión del pasado de Sabine, a lo largo de 25 años y de su terrible enfermedad, el autismo. Muchos recuerdos y sus continuas recaídas hasta llegar a ser internada en una residencia especializada en ese tipo de trastornos.