Opiniones sobre G-Force: Licencia para espiar

Que recuerdos me trae esta película, 10 años han pasado desde que la vi por el ya difunto canal Disney XD (descansa en paz por cierto 😭) s
Sin embargo tengo que decir que aunque está película tiene muy buenas escenas de acción, un conflicto clave desde cierto punto interesante con todo lo relacionado con espionaje y misterio, efectos especiales aceptables, personajes adorables y que hasta ganas dan de tenerlos de mascotas debo decir que esta película viene acompañada de un guión plano que tiene muy poco que ofrecer y un giro argumental que más que sorprender se siente raro.

No creo que valga mucho la pena 😒

Uno de los primeros experimentos de Disney por entrar en el mercado de las películas en 3D y que acabo en la lista de las películas de acción viva de Disney que muy pocos recuerdan. G-Force es una película infantil con elementos de acción, ciencia ficción y bastante comedia que se destaca por sus efectos especiales opacando la historia. A nivel visual es una película muy disfrutable y entretenida. Los efectos digitales son definitivamente lo mejor que se apoderan de toda la película. Los personajes son bastante adorables y demuestran tener personalidad, aunque no se llega a aprovecharlos como corresponde. Darwin definitivamente demuestra ser alguien serio e inteligente, lo suficiente para ser un buen líder. Blaster y Juárez también tienen personalidad y podría haberse explorado más la química de ellos. Speckles sí llega a ser fascinante por tener un oscuro pasado y pudo haber sido lo más interesante de la película. Hurley en realidad suele ser un personaje fastidioso que podría haber funcionado como alivió cómico, pero mucho no llega a eso. La música de Trevor Rabin es buena y la mayoría de las canciones usadas en realidad mucho no pegan con la película. La historia es buena y podría haber sido muy fascinante, pero el guion no es exactamente muy bueno. Una mejor escritura hubiera hecho de la película una experiencia memorable, pero le dieron más prioridad a los efectos especiales que a la escritura. G-Force es una de esas películas de la infancia que solo se la recuerda por la nostalgia y es una película tristemente olvidable. Lo único bueno de ella es que se la puede disfrutar solo por el espectáculo visual de efectos digitales que ofrece. Mi calificación final para esta película es un 7/10.

Tal vez hacer una parodia del cine de espías y de acción no sea el modo más coherente de realizar una película para un público en teoría poco familiarizado con este género como el infantil. El público adolescente no parece que opte por ver a unas ratas haciendo monerías, la verdad. Y el adulto simplemente pierde pronto el interés en un producto tan simple y con tan poca gracia como este ante el que nos encontramos. El guión es muy sencillito y la trama no da para mucho, cayendo en los tópicos más evidentes y en unos diálogos y chistes muy flojos, que sólo harán gracia a los más pequeños. Al resto, incluso se les puede hacer pesada y aburrida la película, que ni tan siquiera está bien hecha.

No es la mejor pelicula de Disney, pero dentro de esta aventura protagonizada por cobayas parlantes tiene una buena trama.

No te esperes una película con un argumento complejo y unos personajes profundos. Esta peli es para pasártelo bien durante una hora y algo, las cobayas animadas me parecían muy graciosas.

Lo que la película quiere transmitir es lo mala que es la crueldad hacia los animales (por ejemplo, spoiler: cuando el adolescente entra a la tienda, coge a la cobaya e intenta encestarla en la jaula de la serpiente para que se la coma, o cuando "usa" a la cobaya para montarla en su coche de juguete a control remoto, o cuando se revela que una de las cobayas fue rescatada de un laboratorio de productos cosméticos en el que investigaban con animales
así que ya sabéis, si tenéis hijos, vigiladles para que no cometan actos tan crueles. Los animales también tienen sentimientos, por mucho que los humanos seamos superiores intelectualmente, no tenemos derecho a tratar a los animales con crueldad