SensaCine adapta las notas de cada medio con una puntuación de 0.5 a 5 estrellas.
críticas de medios
El País
por Javier Ocaña
Por mucho que la preciosa canción de The Zombies She's not there haya ofrecido algunas pistas sobre la pompa de jabón en la que acaba convirtiéndose la trama, lo que carece de toda lógica es ese desenlace trilero y sin sentido alguno del tiempo.
La crítica completa está disponible en El País
El Periódico
por Quim Casas
La película de Perelman intenta a su modo tocar temas candentes sin embargo se pierde en divagaciones algo estériles.
La crítica completa está disponible en El Periódico
DIRIGIDO POR
por Tomás Fernández Valentí
Si a esta resolución tramposa y rebuscada como pocas, le añadimos la blandura de la exposición previa hecha por el realizador, con una sobrecarga de imágenes "bonitas", una estética de postal que se pretende sensible y elegante pero que a la postre se revela zafia y hueca, como de spot publicitario, la conclusión de 'La vida ante sus ojos' no puede ser más decepcionante.
Metrópoli
por Alberto Luchini
El realizador lo único que persigue desesperadamente es convertir el filme en una poesía intimista y profunda y lo que consigue es una sucesión de imágenes empalagosamente relamidas e inaceptablemente cursis.
El País
Por mucho que la preciosa canción de The Zombies She's not there haya ofrecido algunas pistas sobre la pompa de jabón en la que acaba convirtiéndose la trama, lo que carece de toda lógica es ese desenlace trilero y sin sentido alguno del tiempo.
El Periódico
La película de Perelman intenta a su modo tocar temas candentes sin embargo se pierde en divagaciones algo estériles.
DIRIGIDO POR
Si a esta resolución tramposa y rebuscada como pocas, le añadimos la blandura de la exposición previa hecha por el realizador, con una sobrecarga de imágenes "bonitas", una estética de postal que se pretende sensible y elegante pero que a la postre se revela zafia y hueca, como de spot publicitario, la conclusión de 'La vida ante sus ojos' no puede ser más decepcionante.
Metrópoli
El realizador lo único que persigue desesperadamente es convertir el filme en una poesía intimista y profunda y lo que consigue es una sucesión de imágenes empalagosamente relamidas e inaceptablemente cursis.