El proyecto tuvo que esperar diez años para ser producido. Pasó por las manos de tres grandes estudios y tuvo que ser reescrito al menos cinco veces para satisfacer los caprichos de los productores y de las estrellas de cine.
La película originariamente iba a ser rodada en la ciudad de Nueva York, pero más tarde cambiaron la localización a Los Angeles, Praga y, finalmente, Washington.
Chuck Norris se tomó un descanso del mundo del cine después de rodar esta película. Estuvo siete años sin rodar ninguna.