Crítica de SensaCine.com para Más allá de la duda: No te fíes, no te fíes

'Más allá de la duda' (1956), último título de la etapa norteamericana de Fritz Lang, era un thriller tan trepidante como desencantado con un último giro que, además de convertirse en uno de los spoilers por excelencia del cine negro, dejaba claro lo poco que creía este director huido de la Alemania nazi en las bondades del género humano en general y de la justicia en particular. Rodada en blanco y negro hace más de cincuenta años, en Hollywood consideraron oportuno realizar una actualización de la película para las nuevas generaciones. Además de no atreverse a confrontar directamente el tema de la pena de muerte, los responsables del remake confundieron la proverbial capacidad de Lang para ir al grano con simpleza. Así que esta nueva versión se complica la vida de forma innecesaria de manera que acaba torpedeando la principal baza del film: la intriga que se cuece en torno a la idea de un falso culpable que pone en jaque su propia vida para señalar los fallos de la judicatura.

A favor: Peter Hyams consigue mantener el tono cínico al ambientar la historia en dos mundos profesionales, el de la justicia y el periodismo, secuestrados por las desmesuradas ambiciones personales.

En contra: El poco atractivo de los jóvenes actores protagonistas, Jesse Metcalfe y Amber Tamblyn