Últimas opiniones : Gran Torino - Página 2

tenía pendiente este CLÁSICO del maestro, no la había visto en su momento, y me daba el miedo de esas películas que crecen en expectativas por los múltiples comentarios que se van generando, y acaban por echarte a perder la primera visión de la película. Pues este no ha sido el caso, movido por una reciente discusión acerca de la filmografía de Eastwood, hoy me he animado y he disfrutado de principio a fin con este western moderno, en el que dirección e interpretación, hacen que una historia apartentemente sencilla, fluya con perfección a lo largo de toda la cinta. Larga vida Maestro!!!!

Clint Eastwood a menudo criticado en sus años de actor de western por participar en películas con poco... digamos estilo, ha demostrado que es un verdadero genio dirigiendo. El papel de abuelo cascarrabias lo borda. Porqué sera?

Sin duda alguna la mejor película del mayor artista del cine. Gran película con mucho sentimiento de fondo, acción, humor y todo lo que te puedas imaginar. Una obra maestra del gran Clint Eastwood, en mi opinión es su mejor película.

Gran Eastwood.Icónico


Imprescindible pelicula de Clint Eastwood,aún no la he visto en V.O y lo estoy deseando,dicen que gana bastante.Realmente la pelicula te atrapa con cada escena,el guión es un guión magistral y completo y la interpretación del protagonista es genial.Realmente esta pelicula tiene ese toque Clint que la convierte en un imprescindible del cine.Muy recomendable,realmente se disfruta,una obra maestra que trata de la progresión de un personaje,incluso su paso a la fé.Una pelicula que no deja indiferente,cargado de escenas míticas como la del dedo-pistola de Clint Eastwood contra los morenos,muy divertida e icónica.

Al típico estilo de Clint!!!, en este caso habla sobre el tema de la vida y la muerte, y como temas secundarios el racismo, la delincuencia de bandas , la venganza, mucho tema ético, pero a su estilo, lo q mas me gusta el viejo cascarrabias.

La redención del antihéroe americano


Al igual que ocurre con el coche que da título a la película y se puso de moda en la década de los 60 y 70 en E.E.U.U. - Gran Torino-, Clint Eastwood nos regala una obra de elevadas prestaciones y gran potencia dramática lejos del trazo clásico y mirada sobria de su anterior film El intercambio, de ahí que el aspecto formal de la misma pase a un segundo plano ( pocos escenarios y una historia mínima de gran profundidad moral). Este valorado coche de época, tan presente en cine y televisión ( en la serie de los setenteros policías Starsky & Hutch ), es un personaje más que adquiere una dimensión simbólica como metáfora de un tiempo de esplendor.

La historia se centra en un viudo y héroe de guerra de Corea – Walt Kowalski- y las relaciones de éste con la familia y sus vecinos hmongs (etnia del sudeste asiático). El intento de robo de su preciado Ford Gran Torino por el joven vecino Thao, hijo pequeño de los vecinos, impulsa una relación cada vez más cercana con el objetivo de hacer de éste alguien de provecho ante la amenaza de convertirse en un pandillero más.

Clint Eastwood interpreta a Walt Kowalski entre gruñidos y voz rota aunando a personajes de obras anteriores como el militar inquebrantable que dice tacos ( El Sargento de Hierro) o el justiciero ( Harry el Sucio) para poner de relieve la capacidad de transformación del ser humano en un plano social en el que convive lo tradicional ( el maestro devenido de la experiencia veterana de Kowalski y la juventud de Thao) frente a lo contemporáneo ( racismo, interculturalidad, globalidad).

No deja de ser una mirada cercana a su esencia, a su universo temático (relaciones familiares, la iglesia, la justicia, las relaciones humanas) que explosiona en un final abrupto y violento de forma inesperada y, también, conciliadora por la trayectoria vital del ex combatiente que crece emocionalmente conforme avanza la película hasta llegar a la redención marginando todo tipo de prejuicios que pudieran resultar reaccionarios.

En definitiva, no dejen de ver Gran Torino por su magistral dirección e interpretación que nunca decepcionan en el cine del maestro Clint, por su humor destacable (relación con el sacerdote), por sus buenas intenciones integradas en una historia llena de diálogos sencillos que pueden resultar estridentes ( interpelaciones malhumoradas constantes de Kowalski hacia los personajes que habitan el film) y, no por ello menos importante, por la partitura final compuesta y ensalzada por la mística voz de Eastwood.

Interpretación y dirección de Clint Eastwood impresionante (como no), llevando el control de la película a su manera. La pega es (como no) el doblaje a español), no por Clint, sino por las voces de los asiáticos, no les pegan a su físico. En fin: Gracia, acción, pena, misterio. Qué gran maestro.

A los 78 años Clint Eastwood se despide magníficamente de la actuación. Como en los últimos tiempos, ha escogido guiones precisos. Y este en particular, enfrenta las distancias generacionales y culturales de los personajes. Da la impresión que en esta despedida Eastwood hace un resumen de sus interpretaciones más saltantes: el "duro", el "entrenador", el "ajustador de cuentas", el "culposo", y también al "sensible" y mordaz". Y como escribí en mi blog personal, la película trata sobre la violencia, ya sea la silenciosa, la determinada por las diferencias, la violencia compasiva... aquellas que conviven en nosotros mismos.
El gran Torino es el "gran tratado sobre la convivencia".
Pulgares hacia arriba.

Pues, una otra Maravilla del Señor Eastwood...
Desde el guion a los Diálogos "miticos" del personaje interpretado por Clint Eastwood...
.
Esta pelicula es "Magistral"! Interpretación y dirección perfectas del "Grande" Eastwood

Quien fue una vez decepcionado por su trabajo??

Lunes, Cinco de la tarde, día del espectador, poca gente en la sala y en la pantalla “Clint el duro”. Película entretenida donde las haya, Clint Eastwood, sigue demostrando que es un grande del cine, tanto delante como detrás de las cámaras, y desde allí sabe llevarnos donde quiere y a la vez sorprendernos. Esta película no llega a la altura de Sin Perdón, pero entretiene y conmueve, que es lo que el espectador que paga la entrada espera. Yo personalmente la recomiendo, y si es posible en V.O.