¿Quién será el que vuela de noche en un avión Cessna de alas negras, aterriza en pequeños aeropuertos y asesina brutalmente a los residentes locales? Cuando el reportero Richard Dees empiece a seguir a este desconocido asesino, descubrirá pistas que revelarán que este piloto nocturno es un ser mucho más terrorífico de lo que nunca hubiera imaginado.
Otra adaptación más de un relato de Stephen King, por lo general son todas muy mediocres, y esta no es ni de lejos la peor. Un misterioso asesino que presuntamente podría ser un vampiro, que va de una pista de aterrizaje a otra en su avión de color negro como la noche, cobrando vidas. Por otro lado tenemos a un experimentado periodista, ambicioso y quemado por la vida, el trabajo lo persigue pero él también al trabajo. Este personaje simboliza cierta crítica hacia esos periodistas sedientos de sangre y oportunistas. Véase en la escena del accidente de tráfico donde con toda frialdad se para y toma fotos, o la indiferencia hacia los sentimientos de la gente que interroga, quienes a veces rompen a llorar delante suya y él se limita a seguir preguntando y a tomar más fotos. También tenemos a una joven e inexperta periodista que tratará de profundizar en el caso por su cuenta y donde al final unirá fuerzas con nuestro protagonista. Ella es inocente y se inició en esta empresa en busca de nuevas emociones, el veterano periodista la advierte de que las cosas no son tan fáciles y de que el mundo del periodismo es una jungla en la que sólo los más fuertes se abren paso. Así al final culmina en esa madurez emocional que la hace obrar de forma egoísta para ganarse el ser portada.
Una dirección que añade mucho aire de misterio, la tensión se maneja bien y está bien ambientada, con detalles que suman misticismo a la obra, como el diseño del avión y del antagonista, la sangre o la compañía para la que trabajan, especializada en casos macabros y grotescos. El guión es algo mejorable y el montaje también, las escenas donde te meten un flashazo con una foto en blanco y negro tampoco son de mi gusto, me recuerdan a las típicas series de CSI, y es que siento que toda la película tiene un aire de eso. Aunque por lo general bien, la historia va perdiendo peso hasta ese final algo amargo. 5'8.