Esta película fue filmada en sólo ocho días.
La producción fue interrumpida durante un tiempo después de un incidente que afortunadamente quedó en susto. Un vagabundo borracho invadió uno de los set donde se estaba grabando y amenazó de forma violenta con matar a todos los allí presentes. El director rápidamente llamó a seguridad, quiénes se ocuparon de desalojarlo.