En plena Guerra Fría hay dos personas que no saben ni qué es eso: Lo suyo es actuar en salas de mala muerte, uno haciendo de cantante y el otro de comparsa graciosa que acaba por encandilar al público asistente. Aprovechando lo efímero de su fama este dúo es contratado para participar en una fiesta organizada por un miembro de la aristocracia y que reunirá a gentes del bando norteamericano y del soviético. La verdad es que la pareja, Many y Frank se meten en un lío tremebundo, puesto que el evento se celebra en un castillo presuntamente encantado y en el que nuestros héroes sin quererlo, y mientras huyen de las fantasmas, desbaratarán un complot internacional en el que está en juego un importante invento.