Cuando el agente del MI6 Daniel Marchant, que ha sido suspendido de empleo y sueldo, participa en el maratón de Londres, descubre que hay un terrorista suicida cargado de explosivos entre los demás participantes de la carrera. Marchant pronto se da cuenta de que las intenciones del hombre no son otras que cometer un acto terrorista contra la embajada de los Estados Unidos en la capital británica.
Marchat consigue evitar el ataque y salvar la vida del embajador estadounidense, pero su buena acción se vuelve en su contra. Al gobierno de los Estados Unidos le cuesta creer que haya descubierto al terrorista por casualidad, y comienzan a pensar que él también estaba involucrado en el ataque, por lo que le arrestan e interrogan.
La película supone la adaptación a la gran pantalla del libro del mismo título escrito por Jon Stock.