Durmiendo con su enemigo
por Eulàlia IglesiasEl cuarto largometraje de Luchino Visconti suposo un cambio de tercio en su filmografía. El cineasta italiano había sido uno de los fundadores del Neorrealismo con 'Osessione', su adaptación no confesa de 'El cartero siempre llama dos veces' y, sobre todo, 'La terra trema', uno de los films paradigmáticos de esa corriente. En 'Bellissima' aún se mantenía aferrado al realismo de una Italia que ya empezaba a dar muestras de cambio.
En 'Senso', Visconti abandona el interés por el cine del presente y el afán realista que le había llevado a rodar en blanco y negro, para virar hacia el pasado de su país. A pesar de estar rodada en un color fastuoso que subraya el uso simbólico de los colores, a pesar de situarse en la aristocracia decadente en lugar de entre las clases populares, a pesar de adquirir un tono operístico innegable (el film arranca en La Fenice donde se interpreta 'Il trovatore' de Verdi), 'Senso' pone en evidencia el interés que tenía Visconti por el melodrama como género, incluso para retratar los sinsabores históricos que había vivido su país en el pasado y en el presente. Todo a través de una mujer fatalmente enamorada de uno de los soldados del ejército austríaco que ha invadido el norte de Italia.
A favor: Alida Valli como la mujer que se enamora de un hombre más joven y enemigo de su pueblo.
En contra: Farley Granger, evidente miscasting.