Una película bastante insípida, sino inútil. Acabamos la película y estamos tal como la habíamos empezado: no aprendimos nada, solo hemos perdido una hora y media de nuestra vida con un árbol que representa la vida, genial, un niño de 5 años hubiera podido tener la misma idea con lo mucho que hemos visto este tipo de historia. Cursilerías, bobadas, todo lo que quieran, se encuentran en abundancia. Con una actuación bastante superficial, Charlotte Gainsbourg debería dejar el oficio de actor a actores de verdad. Un final tan ridículo que tenemos la impresión de que el autor quería acabar con esto ya, ya que ni siquiera ella podía aguantar más. Lo único bueno de la película es el decorado.