Redford siempre ha sido un cineasta comprometido, en Pacto de silencio parece que quiere demostrar que el Gobierno no siempre tiene la razón y los llamados terroristas no siempre son los malos, suena peligroso, lo sé, pero tampoco trata de justificar la violencia, solo explicar que quizá las cosas no pasaron como se cuentan en la versión oficial. Su personaje se debate entre la verdad, la lealtad y sus principios morales, aunque para mi gusto, se ha quedado demasiado suave, el tema daba para haber sido algo más crítico y comprometido. Lo que no se puede negar es que ha logrado un thriller de buen ritmo y con buenas dosis de suspense, cuando piensas que ya están todas las cartas sobre la mesa, todavía tiene alguna sorpresa guardada, aunque también hay tiempo para instantes más íntimos de charla pausada, el dialogo entre Susan Sarandon y Shia LaBeouf es uno de los mejores momentos de la película.
Otra de las bazas de la película es el elenco de actores, cuatro ganadores de un premio Oscar, el propio Robert Redford, Susan Sarandon, Chris Cooper y Julie Christie, y otros cinco que han sido nominados, Anna Kendrick, Richard Jenkins, Nick Nolte, Terrence Howard y Stanley Tucci. La mayoría en papeles secundarios y con presencia puntual en algún momento de la acción, una pena, pues siempre es un placer ver de nuevo a Susan Sarandon o a un irreconocible Nick Nolte. La niña que interpreta a la hija de Redford es Jaqueline Evancho, una joven cantante que saltó a la fama después de participar en un concurso televisivo de talentos, tiene cinco discos en el mercado y este es su debut en el cine. Los protagonistas son Robert Redford y Shia LaBeouf, este último con peinado que no le favorece nada, y Redford demasiado mayor para su personaje, sin esforzarnos mucho en el cálculo, el personaje debe tener unos cincuenta y pocos, Redford ya tiene 76 y no está para persecuciones ni carreras por el bosque.