De la hibridación entre lo humano y lo 'cartoon'
por Nestor HidalgoAunque 'En pata de guerra' tenga la apariencia de una comedia familiar tan inofensiva como pueda resultar ver a Brendan Fraser siendo constantemente torturado por una serie de animales salvajes que quieren impedir que el bosque donde viven sea talado por la empresa constructora en la que trabaja el actor, lo cierto es que gracias al buen hacer de Roger Kumble a la dirección, la sencilla excusa argumental se convierte en todo un ensayo sobre los límites del cuerpo humano para asumir la maleabilidad infinita de un dibujo animado.
No se trata sólo del tour de force físico al que somete Fraser todas sus articulaciones mientras cae en todas las trampas que le tienden un puñado de bestias digitales de dudoso gusto, sino que la misma concepción formal de los gags es más propia de un cartoon en el que el actor toma el papel de Elmer Fudd, Yosemite Sam, Wile E. Coyote, el gato Silvestre o cualquiera de los pupas profesionales de 'Looney Tunes'. El director de 'La cosa más dulce' (2002) y 'Sólo amigos' (2005) vuelve a demostrar que es capaz de sacar un fantástico resultado cómico de moldes que parecían abocados al fracaso.
A favor: Ken Jeong y Angela Kinsey como secundarios de lujo.
En contra: Brooke Shields también es una presencia física de apariencia artificial... pero ella sin expresividad alguna.