Carrancho y El Rayo están presos en una prisión americana y se dirigen atados de pies y manos hacia la horca. En el último momento, los presidiarios consiguen escaparse y avanzan juntos hacia México. En el camino ven como un grupo de forajidos atracan un carruaje en el que se desplazaba el representante del gobierno. La diligencia lleva mucho dinero y los recién escapados deciden seguirla para ver dónde se dirige. El dinero resulta ser para el dueño de una mina, Morton, y ambos deciden empezar a trabajar para él y tener así más oportunidad de hacerse con el dinero. Carrancho es contratado como minero y El Rayo como vaquero. Con el transcurso de los días se hacen a la idea de la explotación a la que están sometidos los trabajadores de Morton y de la mezquindad de éste.
El spaghetti está dirigido por Alfonso Balcázar y cuenta con la interpretación de Fernando Sancho, Luis Dávila y Robert Woods.