Cuando su familia se muda a una nueva ciudad, Zachary se ve obligado a despedirse de sus amigos de toda la vida y del coro de la iglesia, que recientemente se había clasificado para los campeonatos estatales. Al llegar a su nueva escuela, Zachary se siente aislado y fuera de lugar, luchando por adaptarse a su nuevo entorno.
Sin embargo, su suerte comienza a cambiar cuando hace nuevos amigos y recibe una invitación para unirse al coro local, lo que le devuelve la esperanza y la ilusión por la música.