Fue el primer largometraje que dirigió Kevin Smith sin haber escrito el guion y también el primero que hizo para ser distribuido por un gran estudio de cine.
Warner Bros. compró el proyecto a la productora Gold Circle Films en 2008. En un principio los papeles protagonistas iban a ser interpretados por Robin Williams y James Gandolfini.
Kevin Smith dijo que una de las razones por las que aceptó dirigir el film era porque 'Vaya par de polis' es el tipo de películas que le gustaban a su difunto padre.