Crítica de SensaCine.com para Rescate (Ransom): De rescate a recompensa

Mel Gibson encarna en 'Rescate' el paradigma del héroe norteamericano hecho a sí mismo. Un triunfante hombre de negocios que ha levantado una compañía aérea de la nada (el film empieza con una fiesta donde se celebra su ego: un anuncio de sí mismo se pasa en la tele) y se reafirma ante el mundo al negarse a ofrecer un rescate a los secuestradores de su hijo...

Este giro imprevisto, el del padre que en lugar de pagar un rescate ofrece una recompensa a quien capture al secuestrador, ya estaba presente en el film de 1956 protagonizado por Glenn Ford en que este thriller de Ron Howard se basa. En este caso, la contribución en el guión de Richard Price otorga cierta complejidad al personaje protagonista y a su némesis (Gary Sinise), aunque no la suficiente para que el thriller consiga escaparse de aquello que se espera de  un thriller con niño en peligro en una producción Disney.

A favor: la teoría sobre la organización social que Gary Sinise extrae de 'La máquina del tiempo' de H.G. Wells.

En contra: la loa a la figura patriarcal, caiga quien caiga.