Crítica de SensaCine.com para Sólo Dios perdona: Un Refn desnudo

Nicolas Winding Refn ya no es un extraño. Ya no es el director de un épico relato vikingo. Ni el de un retrato artificioso del violento Bronson. Ahora pasa por ser (a ratos parecería que única y exclusivamente) el autor de 'Drive', un filme a caballo entre la acción descarnada y el romance estilizado. Con esta reestructuración de sus antecedentes, Winding Refn puede sorprender e incluso decepcionar con 'Only God Forgives', en la que el cineasta parece haber difuminado a conciencia el relato amoroso para dejar que aflore el músculo.

'Only God Forgives' tiene algo que ver con 'Enter the Void' (el paisaje urbano, nocturno y exótico, una familia de dejes trágicos y apesadumbrados, las piruetas estilísticas) y mucho de películas como 'Bronson' o 'Pusher' o de los pasajes más oscuros de 'Drive'. Winding Refn no duda en citar a Gaspar Noé en los créditos de la película, sin embargo, el ejercicio de estilización de 'Only God Forgives' resulta menos vacuo que el de 'Enter the Void'.

De entrada, Winding Refn parece haberse planteado cómo abordar la violencia. En la escena central de la película, un hombre es torturado con unos palillos (estamos en Bangkok). La cámara se acerca y se aleja: trabaja sobre el fuera de campo y sobre la explicitación de la agresividad. Todo está medido, pensado, de manera que las soluciones estéticas casen con el discurso de una película que no deja de versar sobre la venganza.

En un ambiente casi artificioso, de pasillos rojizos, callejones húmedos y oscuros y de asesinos con sable, un actor como Ryan Gosling logra confundirse con el resto de la película, logra convertirse en puesta en escena. Icono antes que intérprete, acostumbrado a un único gesto y a vivir de la caracterización, Gosling es el complemento perfecto a la nocturnidad estilizada y a los elegantes movimientos de cámara de Winding Refn.

A favor: Que Winding Refn parece haber pensado concienzudamente cómo representar la violencia que incluye en la película.

En contra: Su estilización extrema.