WONDER WOMAN
LA JUSTICIA COMIENZA CON ELLA.
Esperemos que esta frase no sólo se refiera a la Princesa Diana, sino a TODO el Universo Cinematográfico de DC Comics.
¡Brillante! Sencillamente brillante, es la palabra que por perfección puede describir a Wonder Woman. Por primera vez, desde hace ya un tiempo, que es posible ilusionarse por una película de superhéroes y no llevarse una decepción después de los créditos. Esto se debe a que en ningún momento la película genera el deseo de que termine pronto por lo lenta que es o que lo que se esta viendo es totalmente diferente a lo que vendieron en el tráiler. Es todo lo contrario, uno no quiere despegar los ojos de la pantalla ni un solo segundo, cada detalle es interesante y aun así nunca sobrecarga de información la historia.
Dirigida por Patty Jenkins y protagonizada por Gal Gadot y Chris Pine, Wonder Woman cuanta la historia de origen de una de la superheroínas más famosas y poderosas de todos los tiempos, la Princesa Diana. Desde como fue su infancia, como se convierte en la más “badass” de las guerreras, porque llega al mundo de los humanos, la manera en que se va adaptando a una sociedad que esta en medio de una guerra y lo más importante, el porque decide quedarse abandonando de esta forma la oportunidad de volver a la isla de Themyscira. Y todo esto se logra contar en un lapso de tiempo de un poco más de dos horas, sin llegar a aburrir o abrumar, gracias al perfecto equilibrio de acción, amor y chistes que posee la historia desarrollada por Zack Snyder, Allan Heinberg y Jason Fuchs.
Dos de las mayores molestias que tienen las películas de superhéroes son, en primer lugar, el desarrollar DEMASIADO la historia personal de cada personaje y dejar la acción para los últimos 20 o 10 minutos antes del final, y en segundo que presenten una batalla épica durante casi toda la película, para finalizarla de la forma más absurda, por no decir boba, que se pueda. Sin embargo, Wonder Woman no presenta ninguno de estos dos insufribles defectos. Hay acción en la mayor parte de la película, pero es el hecho de que se libren diferentes batallas a causa de la Gran Guerra, y que se vean los personajes en conflictos, obligándolos a pensar para encontrar el modo de ganarlas, es lo que enriquece la historia. Logrando así exponer combates humanamente posibles, sin dejar de lado la ficción.
Ahora, las escenas de acción son lo que son, gracias a las magnificas tomas y planos por los que cada momento esta acompañado, generando un impacto visual deslumbrante por la genialidad de los detalles que se observan en todas esas situaciones de gran tensión. Wonder Woman es de un riqueza visual exquisita para los ojos, contiene la escenografía correcta para la época, vestuarios hermosamente diseñados, unos efectos especiales de locura, que están muy bien manejados y un traje de superheroína tan prodigioso, que te hace pensar cada vez que lo ves, ¡DEBES SER MÍO!
La decisión de elegir a Gal Gadot para el papel de la icónica heroína, no pudo ser más acertada. Su representación de Diana como la mujer fuerte, determinada, carismática, valiente, solidaria, sensible y de carácter independiente que rompe estereotipos es impecable. Claro está que esta amazona no es la típica mujer de la época, cosa que Gal Gadot entendió completamente, no obstante por estar por fuera de lo común, no implicó que se perdiera en ella la femineidad y la compasión característica de su género. Es debido a esto y la a increíble química que hay entre la actriz y Chris Pine, que las escenas entre Wonder Woman y Steve Trevor son tan atractivas.
Es sensacional poder ilusionarse/emocionarse por el estreno de una película y sentir después de verla, que todo ese tiempo de espera realmente ha valido la pena, porque no han jugado con tus sentimientos al mostrarte un tráiler más interesante que la película en si. Gracias a Wonder Woman, se puede recobrar la esperanza – ya casi desvanecida- en el universo cinematográfico de DC Comics.