Paul (Mimi Brenescu, 'La muerte del señor Lazarescu') tiene una mujer, Adriana (Mirela Oprisor, 'Youth Without Youth'), con la que tiene una relación de profundo amor y amistad, y con la que comparte una hija de ocho años. También tiene una joven amante de la que está muy enamorado, Raluca (Maria Popistasu, 'Conspiración, traición y muerte'). Entre malabarismos, consigue repartir su tiempo entre unos y otros. Pero un encuentro casual entre Raluca y Adriana, le pone los pies en la tierra. Debe elegir con quién debe quedarse y sabe que a una de las dos mujeres le inflingirá un daño irreparable. La decisión lo llevará al borde la crisis existencial.
El director, Radu Muntean ('Boogie'), muestra la complejidad de esta relación a tres bandas sin estridencias, de una manera muy naturalista, introduciéndose en la intimidad de los personajes como si de un voayer se tratara, y aportando un punto de vista bastante difirerente al que nos tienen acostumbradas la mayoría de las películas rumanas que nos llegan en la actualidad.
Amar a dos mujeres y no estar loco
por Eulàlia IglesiasVer más películas : Mejores películas del año 2010, Mejores películas Drama, Mejores películas Drama en 2010.