La canción de los títulos de crédito, interpretada por Shirley Bassey, situó la banda sonora de la película en la octava posición en la lista de discos más vendidos
En el clímax de la película se muestra la cuenta atrás de una bomba atómica. Ésta debía inicialmente finalizar cuando el contador marcara 003. El productor Harry Saltzman le pidió al montador reemplazar la cifra por 007.
El maquillaje dorado con el que fue recubierta la actriz Shirley Eaton era casi tan mortífero como el de la película: sólo una parte no maquillada de la piel de la actriz permitía evitar la asfixia de la epidermis.
En Fort Knox se ve una bandera en la que pone "Bienvenido General Russhon": un guiño al coronel retirado Charlie Russhon, qué ayudó durante la filmación de 'James Bond contra Goldfinger' obteniendo autorizaciones para rodar en localizaciones complejas.
El decorado de la secuencia final, reconstruyendo Fort Knox en los míticos estudios Pinewood, fue, en su día, el más caro realizado nunca. Costó alrededor de de cien mil dólares... algo irrisorio a día de hoy.
La matrícula giratoria del Aston Martin DB5 de Bond realmente funcionaba (fue una idea original del director Guy Hamilton).