El documental se adentra en la población de Forks (Washington), lugar en el que se emplazó el rodaje de la película Crepúsculo, y realiza diversas entrevistas en dicha población comentado con los lugareños sus impresiones de la película.
Además, el documental cuenta con un gran metraje del mismo dedicado a las diversas zonas boscosas en el que tienen lugar una gran cantidad de las escenas más impactantes de la película Crepúsculo.