Opiniones sobre 360. Juego de destinos

Entretenida, original, buenos actores...recomendable en una palabra. La idea de que la vida se puede decidir con una sola decisión en un momento determinado, es la moraleja de esta buena película. Cuando estés en una encrucijada y optes por uno u otro camino, puedes estar decidiendo tu vida. Sexo, infidelidades mutuas, vidas no fáciles....

Toda la magia de la película reside en el montaje, que nos va guiando por los 360 grados que sugiere el título y vamos pasando de una historia a la siguiente, para descubrir que un personaje de una de las historias, también aparece en otra, entrelazándose así una con otra, hasta cerrar el círculo de estas historias aparentemente independientes, pero que tienen en común siete grados de separación.
Además del montaje, es destacable la fotografía de Adriano Goldman que juega muy bien con las texturas y nos ofrece una cinematografía elegante con planos a través de las ventanas, en espejos, pantallas divididas y un montón de efectos visuales muy llamativos como las luces de la ciudad enfocadas o desenfocadas. En cuanto al reparto, en su mayoría son actores desconocidos en España y tres o cuatro nombres importantes (Anthony Hopkins, Jude Law, Rachel Weisz…), todos ellos correctos y solventes.
Pero la película no es tan redonda como puede sugerir el título, hay algunos personajes y varias situaciones que resultan poco creíbles (la relación de Laura y Tyler es especialmente insólita) y las distintas historias aparentan una profundidad y una trascendencia que en realidad no tienen, intentando trasmitir conceptos básicos de la condición humana, como la complejidad del amor, el sexo, las relaciones personales o los riesgos que asumimos al tomar determinadas decisiones y el mensaje final de que debemos aprovechar las oportunidades que nos presenta la vida.

Antes no existía tantas opciones en las relaciones de pareja, al menos visibles. En este nuevo orden surgen posibilidades y situaciones que las personas manejan. A mi ha gustado ver esas relaciones en esta película, es entretenida.

Extraordinaria, como todo lo que hace Meirelles. Este cine cada vez se ve menos. Historias entrelazadas de personas ordinarias que en el fondo son extraordinarias. No apta para los mutantes de la goma-espuma digital que devoran palomitas y trucos digitales de enanos y "supermanes" "destrozalotodo". El día en el que este cine deje de ser rentable lo mejor será que cierren las salas. Huir a la montaña con un buen libro entre las manos, al menos eso no podrán quitármelo.

Muy buen reparto y el guión no es, al final, tan lioso como parece. No creo que vaya a ser el peliculón del año, pero ha servido para pasar una buena noche de cine de ese que te hace pasarlo un poco mal en la sala.