El comienzo de la historia muestra a David, un adolescente que acude a la celebración del 81 aniversario de su abuelo Jack, un hombre al que nada le haría más feliz que poseer una máquina del tiempo para viajar hacia el pasado y disfrutar de nuevo de su etapa cuando acababa de cumplir la mayoría de edad. Con la intención de que esto pueda llegar a producirse, el anciano sopla las velas de la tarta de su cumpleaños mientras solicita su mayor deseo: vivir de nuevo teniendo 18 años recién cumplidos.
Una vez que se ha acabado la conmemoración con familiares y amigos, los dos protagonistas se marchan para regresar juntos en coche, aunque un fallo de concentración provoca que el vehículo vuelque y ambos se vean implicados en un aparatoso accidente. A causa del duro golpe, Jack permanece inconsciente a lo largo de varios días mientras que su nieto únicamente sufre unas pequeñas magulladuras que no suponen ningún riesgo para su vida. Con el paso del tiempo, el señor mayor se recupera por completo del coma, aunque se percata de inmediato de que su mentalidad no se corresponde con su cuerpo y de que al final le ha sido concedido el objetivo de revivir su gloriosa juventud.