En la frontera de Canadá se va a celebrar un acto conmemorativo del centenario de la batalla entre EEUU y los indios. Se pretende recaudar algo de dinero, atraer turistas y representar la situación del siglo pasado entre colonos e indígenas. Todo indica a que va a ser un acto pacífico y divertido, pero un contratiempo hará que todo se desmorone. Cuatro jóvenes indios colarán armas reales con las que se rebelarán contra las injusticias y el racismo, aparentemente enterrado.