'El nombre' no es otra que la adaptación cinematográfica de la pieza de teatro de éxito del mismo nombre y que sus propios autores, Mathieu Delaporte y Alexandre de La Patellièrese se encargaron de llevarla a escena.
Antes de ser adaptada al cine, la pieza de teatro "El Nombre" fue representada al menos en 250 representaciones en el Teatro Edouard VII de París. Un chollo para la mayoría de los actores implicados, los cuales no necesitaron prepararse el papel antes de empezar el rodaje.
Todos los actores principales, estaban en la pieza original de teatro salvo uno: Charles Berling; su personaje, Pierre, había sido interpretado en las tablas por Jean-Michel Dupuis.
En esta película, no encontramos nada de flashback ni de intrigas secundarias. Los autores-realizadores, Mathieu Delaporte y Alexandre de La Patellière procuraron conservar el corazón de la historia, y constituirla como una sola pieza, particularmente insistiendo en el ritmo y la espontaneidad de la interpretación entre los actores, con el fin de conseguir que 'El nombre' fuera lo más realista posible.
"El placer de trabajar a diario con actores es poder redescubrirlos constantemente para así poder sacarles el máximo partido. Así, se puede hacer estallar los registros habituales mostrando las caras más insospechadas", nos cuenta el director Alexandre de La Patellière. En este sentido, cada actor tiene un sentido muy particular dentro de 'El nombre': Un hombre de derechas (Patrick Bruel), un intelectualoide de izquierdas (Charles Berling), la explosiva dueña de la casa (Valérie Benguigui), el tímido (Guillaume De Tonquédec) y la rubia histérica (Judith El Zein). Todo parecido con una familia normal, sería fortuita...
Valérie Benguigui (Elisabeth), que había escogido atribuirles a sus hijos los nombres de César y de Abraham, también tuvo que hacer frente a las observaciones de sus parientes. Así, cuando nació su hijo Abraham, la actriz y su marido decidieron llamarle Eli mientras estaban en la clínica. Pero como a los parientes no les convencía el nombre de Eli (porque decían que no tenía cara de llamarse Eli), entonces le volvieron a poner el nombre que habían pensado en un principio. "Y hoy, todos estamos contentos", bromea Valérie Benguigui.