Glendyn Ivin, responsable de títulos como 'Last Ride' y 'The Deserte', dirige este cortometraje australiano en el que trata de crear una instantánea de la Australia de los años ochenta. Todo lo que sucede en estos quince minutos de cinta se vive a través de los ojos de Eddie (Edith Cattel), un niña que, tras gastar todo su dinero ahorrado en la compra de petardos, vive un momento inolvidable la noche en que tiene que dejar caer al suelo toda esa cantidad de explosivos chispeantes. Eddie, junto a sus padres (Peter Derrick y Pauline Keeley), disfrutará esa noche de un hecho que cambiará el resto de sus días, siendo este recuerdo ese tipo de reminiscencias que acompañará a esta joven allá adonde se dirija.