Un drama intenso
por Israel ParedesDesde mediados de los años setenta, André Techiné ha ido elaborando una filmografía con altibajos pero en su conjunto realmente interesante y personal. Película tras películas Techiné ha ido reformulando su propuesta visual y sus temas adaptándolos al momento, siempre atento tanto al presente como al pasado y atendiendo a sus personajes desde un intimismo que no está exento de una mirada más amplia. Alice y Martin es un buen ejemplo del cine de Techiné durante los noventa. Ayudado en el guion por dos excelentes guionistas, Oliver Assayas y Gilles Taurand, Techiné construye un drama, quizá un poco largo, tenso e inquietante en el que el pasado que un joven desea ocultar sale a la luz precisamente cuando en su presente conoce a una mujer a la que deja embarazada. A modo de puzle, Techiné poco a poco va desvelando las cartas de los personajes para ir creando una narración compleja pero fácil de seguir, con un ritmo que decae un poco al final, pero que mantiene al espectador atento en todo momento gracias a una historia íntima pero llena de aristas y a unos espléndidos actores que Techiné logra sacar partido gracias a una puesta en escena sobria y elegante que se detiene en ellos, ayudándolos a dar forma a unos personajes complejos y emotivos.
A favor: Los actores, el guion, el trabajo de Techiné.
En contra: Que decae algo al final y su duración.