Ambientada en la Rusia de finales del siglo XIX y con el imperio a punto de ser desestructurado, se cuenta la historia de Rasputín, un hombre que logró cambiar la historia y al que muchos conocían como "el monje loco". Algunos creían que poseía una especie de poderes sobrenaturales capaces incluso de salvar vidas. Debido a su gran influencia, también despertó odios, hasta el punto de que un grupo de nobles luchará con el objetibo de mantener la monarquía y acabar con Raspuntín ideando un malévolo plan para evitar que ascienda al poder.