Un excéntrico y maleducado productor de cine llamado Charlie LaRue (Christopher Meloni), quiere hacer una película sobre las bromas más duras, ofensivas y gamberras que se hayan visto nunca. Para que la película salga como el quiere, es capaz de permitir cualquier tipo de salvajada en el rodaje. Quien sea capaz de hacer la mayor locura durante la filmación, saldrá en la película y se convertirá en la estrella.
Película dirigida por Jerry Daigle y Christopher Meloni, que finalmente sería la única cinta que ambos rodarían.