IRREGULAR NUEVA ADAPTACIÓN DEL GÉNESIS BÍBLICO.
El Génesis es el primer libro recogido en el Antiguo Testamento de la Biblia que describe, de una forma simbólica y popular, el origen, la creación del mundo, del hombre y de la vida en general.
A lo largo de la historia del cine, muchos han llevado esta primitiva historia a la gran pantalla, desde la versión de finales de los años veinte (cuando aun el cine mudo estaba en pleno apogeo) del director Michael Curtiz titulada "El arca de Noé" (Noah's Ark, 1928), que mezclaba una breve recreación de la inundación bíblica al estilo de Hollywood con un drama de la Primera Guerra Mundial; hasta los cortos de Disney; multitud de filmes de dibujos animados y diversas variaciones sobre la faceta cómica. Pero ninguna de estas versiones han relatado la historia completa en una vívida epopeya, invitando al público a vivir esos espectaculares acontecimientos a través de la mirada y las emociones de Noé y su familia en su periplo por el miedo, la fe, la destrucción, el triunfo, la calamidad, y la esperanza.
Todo ello viene recogido en Noé ("Noah" en su título original en inglés), una película dirigida por Darren Aronofsky, y protagonizada por un colosal Russell Crowe, que da vida a Noé, el hombre que a petición de Dios, es el encargado de construir una gigantesca arca para salvar la vida animal del gran diluvio universal, que a modo de metáfora, es la forma en que Dios "limpia" la humanidad, de la propia humanidad, corrompida por el pecado original, y su afán de dominar el mundo.
Además de Russell Crowe, destaca la estupenda interpretación de Jennifer Connelly, que demuestra sus tablas, y da aplomo al filme. Huelga decir que ya trabajó junto a Crowe en la oscarizada cinta "Una Mente Maravillosa" (Ron Howard, 2001), atestiguando la buena química que posee con el actor australiano. Asimismo, es destacable también la notable factura técnica, con una espectacular recreación del arca, y una batalla entre los hombres que quieren salvar sus vidas del cataclismo contra los vigilantes (que son unas grandes criaturas hechas de piedra), que a decir verdad, guarda bastantes similitudes a las vistas en la trilogía de "El Señor de los Anillos".
Por contra, tengo que decir que el último tercio del film me ha chirriado bastante, así como Aronofsky se aleja de la épica aventura para centrarse en una especie de "tragedia griega" bastante prescindible, y que a resumidas cuentas, es incongruente. Quizás sea que la película se haya tomado demasiado enserio a si misma; ya que de haber continuado por la senda aventurera, hubiera estado mucho mejor. Del mismo modo se podría afirmar que Anthony Hopkins está totalmente desaprovechado en el rol de Matuzalem (abuelo de Noé), que aparte de no estar bien introducido en la trama, podría haber dado mucho más juego en la historia.
En definitiva, "Noé" es una buena película, con un desarrollo argumental algo irregular, pero con unos efectos especiales bastante logrados y efectistas, y un Russell Crowe realmente genial. Sin lugar a dudas, un filme que, para bien o para mal, no te deja indiferente.