Una historia refrescante que huye de las historias refritas y comunes. Aunque cuando ves no recomendada a menores de 12 en una película de "terror" algo huele mal. Te tiene en tensión toda la película sin necesidad de recurrir repetidamente a los sustos fáciles, (Siempre habrá alguno es una cinta de terror). Lo mejor: Te hace empatizar con el ente. Lo peor: el final tan moña.
Una buena cinta de terror que huye de las ya repetitivas casas encantadas o los mil y un exorcismos que ya cansan y nos presenta una historia melodramática, en algunos momentos tierna sin olvidarse nunca de ese elemento de terror que es el que va buscando el espectador. Pero de tan centrado en los sustos o en el como hacer que su fantasma parezca cada vez más terrorífico, el director ha olvidado argumentar la película, un desastre desde prácticamente el minuto 1, no se explica nada en toda la película que va sucediendo como el que cuenta un cuento sin dar muchas explicaciones donde lo menos fantástico es la aparición del fantasma. En definitiva una oportunidad perdida para Muschietti, que desaprovecha una buena idea, y buenas interpretaciones dejando de lado el argumento y me da que parte de esto es culpa de Guillermo del Tormo, director de desbordante imaginación pero demasiado centrado en la puesta en escena y no en la profundidad de lo que puede hacer a una película grande.