Sueño y silencio : los secretos del rodaje

La película ha participado en la Quicena de los Realizadores del Festival de Cannes 2012.

Después de una serie de cortometrajes, Jaime Rosales debutó con 'Las horas del día' (2003), una película que constituyó una sorpresa por su radical estilo. La película se internaba en la cotidianeidad de un asesino en serie, sin necesidad de aferrarse a ningún tipo de efectismos.

A partir de esta obra, el director se convirtió en una de las grandes esperanzas del cine de autor español. Las expectativas se vieron confirmadas en su siguiente película, 'La soledad' (2007), que ganó por sorpresa los máximos galardones en los Premios Goya de esa edición.

Su tercer largometraje, 'Tiro en la cabeza', fue muy polémico y se vio envuelto en la controversia al girar sobre la banda terrorista ETA en un momento especialmente complicado. Quizás por esa razón fue un film incomprendido.

'Sueño y silencio' es su cuarta película.

Para el director Jaime Rosales, su cine se encuentra extremadamente apegado a la realidad, por lo que le gusta que sus películas extraigan de los elementos de la cotidianeidad todo su jugo. Para él, ninguna historia de ficción puede superar lo que ocurre en el mundo diariamente.

La película no tiene diálogos, es totalmente muda y se constituye a partir de silencios, miradas y gestos.

Además, el método de trabajo que sigue Jaime Rosales, impide que los actores (todos no profesionales), tengan tiempo de preparar sus personajes, ya que las directrices sobre qué tienen que hacer se les proporcionan justo en el momento antes de poners delante de la cámara. Tampoco hay repeticiones, tal y como quedaba la toma, se daba por buena. Solo hay una cámara y la capacidad de los intérpretes para dotar de verdad a aquello que están viviendo.

Jaime Rosales ha trabajado en 'Sueño y silencio' con el artista Miquel Barceló. Ambos intentaron adaptar sus formas de trabajo para que pudieran encajar en la película. Finalmente, a pesar de las dificultades entre las distintos tiempos que existen entre la creación de pintura y el rodaje de cine, ambos quedaron satisfechos con el resultados.