"Nunca realicé un guion cerrado de la película. No hubo ni siquiera un trabajo previo. Todo fue desarrollándose de la manera más natural posible. La familia de Lourdes me abrió las puertas de su casa y con ella compartí sus experiencias malas y buenas. Fue muy enriquecedor para mí ver las cosas a través de sus ojos", cuenta Sánchez.
La directora, Sandra Sánchez, antes de encontrar a la familia de Lourdes, se pasó un verano de feria en feria buscando a las personas adecuadas para el documental. "Unos se mostraban interesados y otros no", cuenta la cineasta. Finalmente, cuando conoció a Lourdes, no tuvo la menor duda de que era la indicada.
Para la realización de la película, su directora, Sandra Sánchez estuvo nueve meses grabando a la familia protagonista, siguiéndoles por todas las ferias a las que asistían y acompañándoles por el camino. Durante este tiempo grabó más de 200 horas de material, que tuvo que reducir finalmente a los 112 minutos que dura el documental.
La película se presentó en el Festival de San Sebastián 2011, siendo su directora, Sandra Sánchez la única realizadora española presente en el certamen.