Al igual que George Lucas con la saga La guerra de las galaxias, que contó con los guionistas Terry Hayes, George Miller y Brian Hannant para Mad Max 2: El Guerrero de la Carretera se inspiraron en las películas de Akira Kurosawa y el libro de Joseph Campbell El héroe de las mil caras.
El perro utilizado en la película, llamado simplemente "perro", se obtuvo de una perrera local y fue entrenado para actuar en la película. Debido a que el sonido de los motores le asustaba (y en una ocasión, le llevó a hacer sus necesidades en el coche), le colocaron tapones especiales. Después de que la filmación se completó, fue adoptado por uno de los operadores de cámara.
El Interceptor negro conducido por Mel Gibson (Braveheart) es un 1973 Ford Falcon XB GT Coupe, un coche exclusivo para Australia. Un número limitado de estos coches fueron exportados por Ford a Nueva Zelanda y el Reino Unido, pero nunca a América del Norte. Debido a que sólo se fabricaron 949 de ese modelo Falcon en particular, se han convertido en uno de los coches más buscados por los coleccionistas de automóviles en seis continentes.
Esta película fue rodada con un presupuesto muy bajo, entorno a los dos millones de dólares. Sin embargo, fue tal su éxito que en el primer fin de semana después de su estreno se superó esa cifra.