Últimas opiniones sobre El destino de Júpiter

Este tipo de acolchado de efectos de FX, no alimentado por el humor o el corazón, es lo que hace que Júpiter Ascienda de un desastre a un fiasco. Los Wachowskis terminan en un lugar donde nunca esperó encontrarlos creativamente: en las cuerdas.

Muy buenos efectos especiales, guion predecible, parece realizada para beneficio de la imagen de Channing Tatum.
Muy fantasiosa y carente de originalidad.

Un entrevero de ideas, algunas media retorcidas en nombre del genero ciencia ficción. Mila Kunis muy frágil y poco dramática para un papel intenso. Channing Tatum inexpresivo. La dirección del hermano y hermano/a Wachowsky opaca y complicándose con su entreverado guion. Al final hay buenos efectos especiales solo que ahora se hacen en el espacio y ya no en ese universo extraño que era Matrix. Como la anterior producción de los directores película poco destacable.

hacia tuempo que no veía una película con tanto efecto especial y tan poco argumento. Después de media hora de película sin saber de que iba seguí viendo el resto, llegando a una conclusion. Quieren ser star trek y se quedan en nada.

El negocio de los Wachowski

En un momento de su última película, los Wachowski ponen en boca del villano lo que significa el negocio del cine, una inmensa maquinaria de hacer dinero cueste lo que cueste, aprovechándose de quien se cruce por su camino. No es casualidad que estos dos hermanos condenados por parte de los espectadores y de los productores a repetir el éxito de su ambiciosa epopeya matricial carguen de esta manera sutil contra la industria del entretenimiento, pues tan pronto estuvieron en lo más alto como tocaron fondo en sucesivos trabajos.

Pero por mucho que arremetan contra la misma industria que les da de comer en forma de superficial discurso capitalista, lo cierto es que la culpa de que no hayan vuelto a levantar cabeza es suya y solamente suya. Porque es sólo culpa de ellos no haber sabido aprovechar los generosos 170 millones de dólares que Warner, que mima más la autoridad de sus cineastas antes que el mero hecho de amasar millones, para narrar algo mínimamente interesante y entretenido.

Lo único que puede salvarse de esta “El destino de Júpiter” es su factura técnica. Efectos especiales de infarto, un gran trabajo de maquillaje, vestuario, un excelente sonido, una solvente banda sonora a cargo de Michael Giacchino… Su abultado presupuesto se nota en cada detalle de la producción, y lo que los hermanos obtienen es un espectáculo de pirotecnia visual para ver con la boca abierta y en pantalla grande. Pero entre tanta escena de acción frenética pero reiterativa, conflicto fraternal no resuelto, bienvenido cameo sorpresa montypythoniano y boda bizarra, “El destino de Júpiter” se ve frustrada por un guión que ya acusa importantes agujeros desde su presentación, al minuto de arrancar la proyección. Personajes pésimamente dibujados, situaciones que deberían ser graciosas pero resultan vergonzosas, y una sensación general de no creerte nada de lo que te están contando. Los actores hacen un esfuerzo y un acto de fe por creerse la trama, pero es la más floja de la función, Mila Kunis, la que viene a sintetizar la sensación del público con su “No me j****”constante.

Y, encima, los Wachowski intentan vendernos de nuevo la historia que les hiciera famosos hace casi 15 años. Es decir, la del elegido que debe salvar a la Humanidad de ser cosechada por una raza superior que incluso puede alterar nuestra percepción de la realidad a su antojo. Esta vez sin chispa, sin una mezcla de géneros y estilos coherente y que funcione –aquí también está “Dark City” como una de sus referencias, mezclada con otras del género como “Dune”-. Uno se pregunta si aquella alegría que supuso “El Atlas de las Nubes” no fue en realidad fruto de la presencia de Tom Tykwer, y si estos dos hermanos no tuvieron ya su momento de gloria y realmente carecen de verdadero talento. Lo peor de todo esto es que, en su idea de negocio, los que salimos perdiendo somos los espectadores que pagamos por ver este monumental bodrio aburrido e insustancial bañado de atractivos fuegos artificiales.

A favor: su factura técnica
En contra: todo lo demás

Muy muy muy lejos queda la primera “Matrix” y el prestigio de los hermanos Wachowski como directores, si con “el Atlas de las nubes” casi pido que me devuelvan el dinero ahora además nos llegan con una especie de mezcla "versión Disney" de “Dune” y "los juegos del hambre" o cuando menos una peli de ciencia-ficción para adolescentes, con no sé qué rollo de realeza todo el rato que siempre me resulta cansino (y en el Cine también), con “botas para surfear”, “hombres-perro”, “hombres-abeja”, abogados intergalácticos…. y además nosotros vamos y añadimos un malo con voz ronca mal doblado, también llama la atención los efectos especiales, se supone que el paso del tiempo hace que estos por narices sean mejores sin embargo aquí brillan por su poca calidad, confusos, poco realistas……para dormirse.……..y encima toca pagar más porque es de la Warner…….tócate los …………

Un claro ejemplo de como exceso de efectos especiales pueden hacer insoportable una película. Aparte de la pobre trama. Yo no la recomiendo a menos de disfrutes exclusivamente de escenas de acción imposibles con gran parafernalia visual. El único punto que le vi fue la original motivación del interés de los malos en la tierra y la razón de ser de esta.