Gabriel Velázquez debutó en 1996 con el cortometraje 'En Madison siempre es lunes', al que le seguiría 'Parabellum' (1998).
A partir del documental 'De Salamanca a ninguna parte' comenzaría una colaboración junto al también realizador Chema de la Peña, con el que abordó 'Sud Express' (2005), su primera película como director.
Ya en solitario firmó 'Amateurs' (2008), que fue presentada en el Festival de San Sebastián.
'Iceberg' es su tercer largometraje.
La película surge del regreso del realizador a sus orígenes, a la ciudad de Salamanca.
Su fuente de inspiración fue el río Tormes.
Junto a su guionista, recorrió el curso del río y decidió que de allí partiera todo, que todas las historias que compusieran la película, tuvieran ese nexo en común.
Al director este río le traía recuerdos de su infancia, y también le volvió a sugerir lo mismo que cuando era joven: su espíritu indómito, su frialdad y cierta sensación fantasmal. Unos aspectos que están reflejados en el carácter intrínseco de su película.
No es la primera vez que el director Gabriel Velázquez se introduce en el universo de la infancia. Es un tema que le ha interesado desde su cortometraje 'Soldaditos de latón' (2001), en el que contó con niños de diferentes nacionalidades.
Más tarde, retomaría este tema en su primera película en solitario, 'Amateurs' (2008), que reunía a una adolescente de 16 años y un hombre retirado en una historia sobre el inicio del amor.
La película es prácticamente muda, los personajes apenas hablan, de forma que poco a poco nos vamos adentrando en sus respectivos mundos interiores, así como en la cotidianidad de sus actos.
Es una película desnuda, en la que ningún ingrediente sobra, con un estilo despojado, absolutamente minimalista.
La música que aparece está basada en el folk de la zona, con unos instrumentos muy especiales fabricados específicamente para la ocasión y que nos sumergen en un espacio auditivo casi onírico, extraño y fascinante.
Los actores protagonistas son no profesionales. El director realizó un casting a través de las redes sociales y también se desplazó por todos los colegios que pudo para encontrar el perfil concreto. Necesitaba que fueran de la zona de Salamanca y buscaba que se acercaran a la naturalidad y verosimilitud que quería transmitir. Finalmente dio con los tres actores protagonistas, Carolina Morocho, Víctor García y Jesús Nieto.