Reflejo fiel de la vida en un pueblo; aburrida, lenta, silenciosa, eterna, donde el tiempo no pasa, donde el espacio se desdibuja y los minutos se convierten en horas. El problema es que te aburres tanto como los protagonistas!!! Perdón, corrijo, porque ellos, al menos, tienen sus pequeños alicientes; tú no tendrás ni eso. Una excelente fotografía de nuestro medio más rural y tradicional, afianzada cultura de nuestra historia más profunda cuyo valor se limita a ser una exposición de un tipo determinado de vida, exhibición neutra e inerte que no cautiva ni seduce al espectador, un cansino observar pasar la cinta donde pronto perderás la esperanza de resurrección repentina. Cámara estática, actores no profesionales, escaso diálogo, contexto cliché, escenas pueblerinas, un medio conservador y arcaico, la vida sin movimiento como protagonista..., buenas intenciones que no producen el rendimiento deseado. Esas buenas intenciones, propósitos loables, sirven de muy poco cuando, al terminar la película, suspiras interiormente por la finalización de la misma; no llegas a dar gracias pero..., casi!!