Con la primera parte de la trilogía, Contra la pared, el director Faith Akin recibió el Oso de oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín en el año 2004.
Debido a que cuenta el genocidio armenio de 1915, el director Fatih Akin recibió amenazas de muerte.
Tras su presentación en el Festival de Cine de Venecia, los críticos quedaron decepcionados pero a Fatih Akin no pareció preocuparle porque según declaraciones, sólo le interesaba hablar sobre ese tema tan controvertido: “Mi mayor sueño es que esta película sea presentada en las salas de cine de Turquía.”