Crítica de SensaCine.com para El guerrero nº 13: Los 12 vikingos

El decimotercer guerrero de esta adaptación de 'Devoradores de cadáveres' de Michael Crichton es un elegante poeta árabe, Ahmed, al que encarna Antonio Banderas con más voluntad que verosimilitud. Ahmed se une a una docena de bravos y brutos vikingos que deben defender un pueblo del ataque de una misteriosa tribu caníbal. Así, un personaje que parece escapado de 'Las 1001 noches' glosa las heroicas gestas de una suerte de Beowulf en una situación bélica parecida a la de 'Los siete samuráis'. A partir de la novela de Chrichton, John McTiernan también mezcla fantasía heroica, personajes reales y fabulación histórica en una cinta de acción donde los vikingos, por una vez, no son los más sanguinarios. 'El guerrero número 13' desarrolla una historia de camaradería masculina en una curiosa encrucijada de civilizaciones que podría haber resultado mucho más interesante si no hubiera acabado supeditada a la acción salvaje (una pierde la cuenta de las decapitaciones). A Crichton tampoco le debió entusiasmar el resultado, ya que él mismo volvió a rodar algunas escenas.

Lo mejor: El sentido del humor y el compañerismo vikingo.

Lo peor: Antonio Banderas... ¿poeta árabe?